¿Qué sucede si le decimos que la mejor manera de perder peso, aclarar la piel y liberar toxinas es aprovechando algo completamente gratis? Suena demasiado bueno para ser verdad, ¿no es así? Estamos hablando de agua.
Estas son las cuatro razones principales por las que es importante beber la mitad de su peso en onzas (máximo 90 oz) de agua cada día:
Batir la deshidratación: el agua representa más de la mitad de nuestro peso corporal, y todos perdemos agua cada vez que usamos el baño, el sudor e incluso cuando respiramos. Cada célula, tejido y órgano de su cuerpo necesita agua para funcionar correctamente, y si su cuerpo no recibe suficiente agua, se sentirá fatigado.
Evita los antojos: a veces nuestro cerebro confunde el hambre con la sed, por lo que la próxima vez que sientas ganas de comer algo, anímate a tomar un vaso de agua. En cuestión de minutos, te darás cuenta si necesitabas agua o tenias hambre. ¡Beber un vaso de agua antes de comer una comida también lo ayudará a sentirse lleno más rápido para evitar comer en exceso!
Ahorre dinero y reduzca el consumo de calorías: la sustitución del agua por refrescos, jugos, bebidas alcohólicas y otras bebidas azucaradas no sólo le ahorrará dinero, sino que también minimizará el exceso de calorías, productos químicos artificiales y azúcares que consume. El hecho es que elegir agua en lugar de Coca-Cola ahorra a tu cuerpo 140 calorías y 39 gramos de azúcar, y agrega unos cuantos dólares a tu billetera. Si bien estos ahorros pueden parecer pequeños al principio, seguir con este cambio de estilo de vida (especialmente al comer en restaurantes) puede ahorrarle miles de dólares cada año.
Pérdida de peso: los estudios han demostrado que la pérdida de peso se correlaciona positivamente con tomar agua. Beber la cantidad correcta de agua no solo ayuda a nuestros cuerpos a eliminar las toxinas, sino que también acelera nuestra tasa metabólica. Este es el proceso en el que nuestro cuerpo convierte los alimentos en combustible, y si su tasa metabólica es lenta, su cuerpo almacenará los nutrientes digeridos en los alimentos como tejidos grasos en lugar de músculos.
Por lo tanto, pruébelo! : todo lo que tiene que hacer es dividir su peso corporal en dos y comenzar a beber esa cantidad de onzas de agua todos los días (máximo 90 oz). No te arruines demasiado la matemática, simplemente encuentra tu botella de agua y calcula cuántas veces al día necesitarás volver a llenarla para alcanzar tu objetivo.
Tip profesional: si no eres un gran fanático del agua debido a su sabor sencillo, puedes mejorar el sabor de forma natural. ¡Intente agregar hierbas orgánicas como la albahaca o la menta con rodajas de pepino, limones o limas, y las bayas también ayudan a que tenga mejor sabor! Se pueden preparar frescos o por adelantado: el sabor tendrá un sabor más fuerte si lo deja reposar en la nevera durante la noche, pero apunta a beberlo dentro de las 24 a 36 horas.